Wolfire Games presentó una demanda en abril, alegando que Steam suprimió la competencia y cobró tarifas excesivas.
En abril, el desarrollador de Overgrowth, Wolfire Games, presentó una demanda antimonopolio contra Valve, alegando que el dominio de Steam en el mercado de juegos para PC le permitió recibir un "recorte extraordinariamente alto" de las ventas a través de su tienda. Valve respondió en julio diciendo que la denuncia de Wolfire no cumplía con "los requisitos más fundamentales de una demanda antimonopolio" y, como resultado, le pidió al juez que desestimara el caso. En un fallo presentado hoy, el juez del caso estuvo de acuerdo con Valve.
El fallo, disponible en su totalidad en CourtListener, dice que el caso de Wolfire se queda corto en dos puntos separados. En primer lugar, se niega la acusación de que Valve vinculó ilegalmente la tienda Steam a la plataforma, esencialmente usando el casi monopolio de Steam como biblioteca, iniciador y plataforma de redes sociales para obligar a las personas a comprar juegos a través de la tienda Steam, porque las afirmaciones en la demanda se basan en el hecho de que la plataforma y el escaparate de Steam en realidad afirman ser "un único producto en el mercado integrado de plataformas de juegos y transacciones".
El caso de Wolfire también argumenta que Valve usó su casi monopolio para cobrar a los proveedores una tarifa excesiva del 30%, lo que no sería sostenible en un mercado competitivo. Este reclamo provocó algunas conversaciones interesantes a principios de este año, pero el juez desestimó el argumento y afirmó que la decisión de Valve no ha cambiado a lo largo de la historia de Steam, incluso cuando otras tiendas en línea van y vienen que exigen porcentajes más bajos.
